El sector de los materiales de construcción está en clara internacionalización y busca nuevos mercados donde continuar su expansión exterior en los próximos años. La industria de cerámica, azulejería, cemento y manufacturas de madera y acero ha liderado claramente el aumento de las exportaciones españolas en el último ejercicio con incrementos en todos sus subsectores superiores a la media nacional (+15,4%). Así se ha registrado en azulejos y pavimentos cerámicos, donde las ventas al extranjero crecieron un 8,3% (1.892,1 millones de euros); el cemento y la piedra, con un alza del 19,2% (1.907 millones de dólares, en torno a los 2.700 millones de euros), o las manufacturas de hierro y acero, que ascendieron un 39,7%.
El desplome de la demanda interna ha hecho de este sector uno de los más pujantes en su balanza comercial internacional, con casi el 70% de su facturación en el exterior, y cada año se abre camino hacia nuevos países. Según los análisis de IICE (Instituto Internacional de Conocimiento Empresarial), México y Colombia son dos mercados con grandes expectativas para el sector, favorecido por el acercamiento emprendido por el actual Gobierno español. Ambos mercados estarán presentes en la primera Semana Internacional de la Construcción que se inaugura hoy en el recinto ferial de IFEMA (Madrid) y que se desarrollará hasta el viernes. Este nuevo formato de feria trata de concentrar fuerzas y es el resultado de la integración de tres eventos: CONSTRUTEC, Salón Internacional de la Construcción; VETECO, Salón Internacional de la Ventana y el Cerramiento Acristalado, y PIEDRA, Feria Internacional de la Piedra Natural.
En el encuentro se ha introducido un programa de Compradores Internacionales invitados por la organización, por lo que resulta fundamental conocer la demanda de cada país de origen. México y Colombia resultan especialmente atractivos por el crecimiento de la construcción y la demanda de nuevos productos de alta calidad.
Según los estudios de mercado del IICE, México es uno de los países con mayor potencial de negocio relacionados con proyectos de acabados de construcción en Latinoamérica y la previsión es que la población demandará anualmente entre 700 y 900.000 casas nuevas en los próximos 20 años. El sector constructor ha sido uno de los más fuertes y ágiles para contrarrestar el impacto económico global y desde el Gobierno se incentiva la actividad con nuevos planes residenciales y comerciales. Las principales fortalezas en el ámbito de los acabados son: el desarrollo de proyectos de vivienda (remodelación, construcción de casa nuevas de ingresos bajos, medios y altos principalmente en las ciudades más pobladas, como México DF, Guadalajara, Monterrey, Querétaro, Pachuca y Toluca); el creciente interés de las empresas locales hacia las nuevas tecnologías verdes y la edificación sustentable; y la existencia de una emergente clase media que demanda productos de mayor valor agregado, además de un mercado turístico con mucha inversión y gran potencial.
Las previsiones de crecimiento se extienden a todos los subsectores, incluida la madera, donde se registran aumentos medios de demanda del 10%. Además de participar en la obra nueva, hay oportunidades en el mercado del mantenimiento y la reparación. Los materiales más comunes requeridos son: pintura tanto interior como exterior, materiales de pared, suelos y techos, rejas, puertas, ventanas, gabinetes de cocina y baño, fontanería y cableado eléctrico. Respecto a los productos finales, los principales productos demandados por el mercado mexicano son las puertas y ventanas, así como sus marcos y contramarcos de hierro y acero.
Por su parte, en Colombia, la construcción acumula nueve años de crecimiento, con un promedio anual sobresaliente del 9,1%. Esta expansión se ha conseguido, en gran parte, con la entrada de inversión extranjera, que llega a suponer el 8% del total del país. Además, el país presidido por Juan Manuel Santos goza de una creciente estabilidad y seguridad, y apuesta claramente por el aperturismo comercial. Los ámbitos con mayor crecimiento son la hotelería, que en 2010 registró un incremento del 148% por licencias de nueva construcción, las obras civiles y las edificaciones, que subieron un 39% y un 29%, respectivamente.
Las zonas de mayor atractivo para la inversión española son la capital Bogotá, donde se concentra el mercado interno colombiano; y las regiones de Cartagena, Barranquilla, Buenaventura y Cali, donde tienen como principales ventajas la conexión portuaria y la disponibilidad de mano de obra, así como la posibilidad de ser epicentro para el acceso a otros países americanos.
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