Tener una ubicación privilegiada en el corazón del continente americano y ser el país de la zona sur que más protege a los inversores extranjeros son dos de las características que confieren a Colombia la condición de mercado preferente para las pequeñas y medianas empresas (pymes) españolas dispuestas a internacionalizarse y exportar sus productos y servicios.
Pero no son las únicas. La empresa que promueve el negocio internacional de Colombia es Proexport y su responsable de inversión extranjera, Julio César Galvís, es claro a la hora de exponer las ventajas que hacen de este país un mercado atractivo para los españoles. Una de ellas es el “importante crecimiento” del PIB registrado en los dos últimos años: en 2010 se incrementó en un 4 % y en 2011 un 5,9 %. Además, Colombia cuenta con “quince zonas francas y un impuesto sobre la renta bajo, del 15 %, frente al 33 % de otros países cercanos”. Además, en los últimos años, ha adoptado numerosas medidas enmarcadas en el Plan de Desarrollo 2010-2014 “Prosperidad para todos”, con las que se pretende mejorar y hacer crecer a las cinco de las “locomotoras” del país: la agroindustria, las infraestructuras, la innovación, la minería y la vivienda.
El impulso que el Gobierno colombiano ha querido dar a estas industrias se traduce, según Mariano Díaz, uno de los socios de la compañía especializada en ‘outsourcing’ VPS, en “la aparición de nuevos sectores dinámicos” y atractivos para los inversores extranjeros, como el financiero, las telecomunicaciones, los hidrocarburos y, en general, todo lo relacionado con los servicios.
Precisamente dentro del sector servicios y, concretamente en el área del turismo, se enmarcan algunas de las deducciones fiscales más atractivas del país, como la exención del pago del impuesto de la renta por 30 años para aquellos que inviertan en la construcción o remodelación de hoteles antes de 2017.
Otras medidas con las que Colombia espera captar la atención de las empresas españolas se adoptaron en 2010 y 2011. Díaz considera que gracias a ellas “se han evitado muchos de los problemas” que dificultaban la implantación de nuevas empresas en el país. Por un lado, el Gobierno ha podido reducir los costes asociados con el inicio de un negocio al dejar de exigir el pago por adelantado de la tasa de licencia comercial. Por otro, el país latinoamericano ha conseguido aliviar la carga administrativa de pago de impuestos para las empresas, estableciendo la presentación electrónica obligatoria y el pago online de algunos de los impuestos más importantes.
Por último, Andrés Camacho, socio también de VPS, califica a Colombia como “el país más reformador de la región y con el ambiente más amigable para hacer negocios” y ofrece a los empresarios españoles diez razones para invertir en su territorio y no en otro:
1. Seguridad en la inversión.
2. Compromiso publico e incentivos estables.
3. Desempeño económico sostenible.
4. Plataforma exportadora con preferencia de entrada de 1.500 millones de personas.
5. Ubicación estratégica.
6. Recursos Humanos suficientes y cualificados.
7. Infraestructuras.
8. Polos de vivienda (más de 10 ciudades que superan los 500.000 habitantes).
9. Diversidad biológica.
10. Calidad de vida.
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